jueves, 29 de junio de 2017

PORQUE SÍ...

Porque sí. La respuesta sale automáticamente de mis labios. Sin pensarla. Sin dudar. No hay tiempo ni razón. Simplemente la suelto y, como siempre, la medito más tarde.
Su cara al oírla, me lo dice todo. Ceño fruncido y labios apretados. ¿Qué esperaba? Un largo discurso de excusas rebuscadas? Un motivo que tranquilice su conciencia? Sobran las palabras...
La mano paralizada sobre el café que ambos disfrutamos juntos. Su mirada clavada en mis ojos, esperando un atisbo de concordancia que, en esos momentos, no existe. 
Ah...la pregunta? Sólo un " ¿Por qué? ". Tan concisa y vacía como mi respuesta.
Quizás también necesite meditarla más tarde...
Silencio incómodo, incapaces de romperlo. Momento oscuro en el que no quiero permanecer. 
Me levanto, dejando intacto mi café y un hombre desconcertado creyendo que no tengo argumentos. Pero, sí, claro que los tengo. A veces es mejor callar y alejarse que luchar contra la nada o explicar mil veces lo que no se entiende. 
Porque sí o porque me da la gana. Porque así me apetece. Porque yo lo digo o porque así lo quiero. Porque yo soy yo y porque él es él y nuestras circunstancias no son las mismas...
Un adiós a tiempo es mejor que un hasta luego permanente...

No hay comentarios:

Publicar un comentario